Chic parisino

El apartamento Hubert es un sofisticado pasillo lleno de luz, amplitud y los espacios justos y necesarios para una vida urbana

18/07/2016

Si derribar paredes es una de las claves para aprovechar mejor unas dimensiones reducidas, este apartamento cuenta también con varios trucos muy útiles en territorio urbano. Para September, no había espacio que perder, cada centímetro cuenta en este diseño optimizado de 60 m2. A ello apuntan las puertas correderas que ...

 

Si derribar paredes es una de las claves para aprovechar mejor unas dimensiones reducidas, este apartamento cuenta también con varios trucos muy útiles en territorio urbano. Para September, no había espacio que perder, cada centímetro cuenta en este diseño optimizado de 60 m2. A ello apuntan las puertas correderas que separan cada habitación, lo que acentúa el flujo de espacio y luz entre cada área. Otro de los grandes aciertos fue utilizar el suelo como delimitador de espacios. Así, el suelo está hecho a partir de cemento, madera y dos tipos de baldosas en cada punto de la casa, lo que ayuda a definir cada una de las habitaciones que componen el apartamento. En la zona de madera natural que es la cocina-comedor-salón, el cemento es lo que en el suelo delimita la frontera de la cocina, cuya presencia es silenciosa y elegante. La cocina “tenía que ser tan discreta como fuera posible, puesto que se encuentra completamente abierta al salón. Es por ello que decidimos no contar con ningún electrodoméstico a la vista”, cuenta Lina Lagerstrom, project manager de Hubert.

Al igual que la cocina-comedor-salón ocupa uno de los laterales de la casa, el otro se cede al ámbito privado del dormitorio y el cuarto de baño. Así lo indica el color blanco, que hará eco de la pureza y la intimidad de esas estancias, un cambio de perspectiva automático al pasar de la oficina improvisada en el recibidor al dormitorio colindante. En él, una cama doble aprovecha una pared hasta el techo como cabezal, también en blanco, que esconde un amplio armario abierto que va de suelo a techo; de nuevo, un truco genial para aprovechar el espacio.

Chic parisino

Siguiendo el blanco del parqué en el dormitorio, uno se da de bruces con la gran sorpresa del diseño de Hubert: un cuarto de baño coqueto y original, donde los tonos negros y dorados se hilvanan. Lo moderno se mantiene como regla, mientras que hay en esta estancia algo que apela al pasado. Es el caso de unas tradicionales baldosas hexagonales que cubren paredes y suelo, matizadas por un mosaico de baldosas en blanco y en negro. Este color que aparecerá en el espejo y estantes, además de en los marcos de unas puertas de cristal transparente, todo ello obra del estudio francés 13 Douze.

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