Eficiencia. Así se puede resumir todo aquello que representa el mueble de cocina alemán para la industria. Una eficiencia que se demuestra a distintos niveles. Por una parte, en unas cifras que crecen año tras año desde que el sector supo cómo dejar atrás la última crisis. En concreto, desde ...
Eficiencia. Así se puede resumir todo aquello que representa el mueble de cocina alemán para la industria. Una eficiencia que se demuestra a distintos niveles. Por una parte, en unas cifras que crecen año tras año desde que el sector supo cómo dejar atrás la última crisis. En concreto, desde 2011 la cifra de ventas de esta industria ha pasado de los 4.039 millones de euros a 4.794 millones, lo que significa un aumento del 18,7%. Es decir, entre 2015 y 2016, el sector del mueble de cocina alemán facturó un 4,8% más.
Exportación del 38%
Eficiente es también su estrategia para seguir mejorando en cuanto a exportación. Pese a que el export ha sido tradicionalmente uno de los puntos fuertes de la economía alemana en general, y del sector de la cocina en particular, los fabricantes de mueble han sido capaces de seguir creciendo en este aspecto, exportando cada año más producto a todo el planeta. En 2016, fueron 1.843 millones de euros los facturados gracias a este concepto; en otras palabras, el 38% de la facturación total se obtuvo fuera de las fronteras germanas. Mientras, la importación permanece estable desde hace varios ejercicios. De hecho, desde el 2012, esta cifra se ha mantenido por debajo de los 30 millones de euros. Cierto es, sin embargo, que en el 2016 se rozó esa marca, ya que el mercado alemán importó 29 millones de euros en mueble extranjero, un 3,6% más que en el año anterior; una cifra que es, pese a todo, insignificante comparada con las demás variables de esta industria.