Cuando se publicó el primer número de esta revista, en 2002, Francisco Albertos, director general de Duscholux Ibérica, se encontraba trabajando en la oficina técnica de la compañía, desarrollando productos y otras tareas internas. Desde el punto de vista de este directivo, el sector ha cambiado
poco en estos 15 años y actualmente "está adaptándose lentamente a la rápida evolución de la demanda". Según él, la llegada de la venta online y la gran distribución han influido de manera directa
en el mercado nacional del baño. "La enorme oferta de productos importados, en su mayoría de bajo precio, genera problemas a los fabricantes nacionales, los pocos que quedamos, que tenemos dificultades en la rentabilidad de la venta de distribuidores. A esto hay que añadir la decepción del consumidor, excluyendo el precio", explica. A su parecer debería redactarse una nueva legislación que obligara a identificar con claridad el origen de los productos a los que accede el cliente final.

Modernizarse o morir
No obstante, Francisco Albertos tiene el convencimiento de que el sector necesita acelerar su modernización porque avanza muy poco a poco. Insiste en que el futuro se encuentra en ofrecer novedades y servicios diferenciales. "La distribución debería reajustar los miles de metros cuadrados de exposición que tiene, implementar nuevas tecnologías y exponer productos. Pero no sólo de marcas reconocidas, sino con materiales, calidades y diseños diferenciales que permitan ofrecer
a sus clientes lo que no pueden encontrar en otros canales de venta", asegura. Resume la situación actual del sector de este modo: "El usuario  nal compra en digital y la distribución vende en analógico".

En definitiva, vaticina al sector una lenta recuperación e insiste: "Su salud, en general, dependerá de no repetir errores del pasado". Por su parte, recomienda un urgente cambio de estrategia a la distribución clásica, "en mi humilde opinión, debería trazar un plan estratégico, a quién se dirige, con quién quiere trabajar y con quién compite", puntualiza. Duscholux ha sabido mantenerse activo durante estos años y sobrevivir a los cambios drásticos que ha vivido el sector desde 2008. Se ha ganado un sitio gracias a la aportación del vidrio en la mampara de un modo solvente y definitivo. La innovación ha llegado al baño –según explica–, con "la introducción de nuevos materiales cerámicos y la utilización de sistemas de ahorro en consumos eléctricos e hídricos. La calefacción en el baño, muebles, griferías donde encontramos más confort y, por supuesto, más diseño con mejor aprovechamiento del espacio".