Los mosaicos de vidrio Hisbalit, protagonistas del nuevo proyecto de remodelación del Hotel Azul de Suances

Los revestimientos de Hisbalit , marca especialista en el diseño y la fabricación de mosaicos de vidrio, han sido elegidos por los profesionales del estudio de arquitectura Zooco para protagonizar el nuevo proyecto de remodelación del espacio gastronómico del Hotel Azul de Suances, en Cantabria.

Ubicado en la zona occidental de Cantabria y a escasos 30 km de Santander, este hotel sorprende por su pintoresca decoración. Se encuentra en un edificio clásico pero caracterizado por un interiorismo actual y moderno donde se presta gran atención a cada detalle. En sus ambientes, destaca la importancia de la luz y el color, especialmente en su amplio salón y su terraza privada, que convierten al Hotel Azul en el escenario ideal para cualquier tipo de celebración o evento.

El antiguo espacio gastronómico del hotel se organizaba en torno a un gran lucernario central que, antes de la remodelación, se hallaba olvidado y sin ningún protagonismo. Fue precisamente bajo este gran lucernario, donde se situó el mosaico de vidrio de la firma; en concreto los modelos 103A y 106 A de su colección Unicolor , en formato redondo y 2,5x2,5. Estos materiales encajan perfectamente con el estilo decorativo del hotel: van acorde con la gama cromática del conjunto, así como con su estética moderna y natural, donde el cuidado de cada detalle se convierte en algo prioritario.

Los arquitectos apuestan una vez más por Hisbalit. Esto se debe a las características privilegiadas que ofrece el mosaico de vidrio como material poco poroso e ideal para ser utilizado como revestimiento . Actúa además como aislante , evitando fricciones, humedades y la aparición de hongos. Por otra parte, es óptimo para espacios que albergan mucha actividad –como un restaurante- ya que es resistente a los cambios bruscos de temperatura, al desgaste, a los golpes y apenas requiere mantenimiento. Destaca también por su durabilidad, con una media de vida entre los 35 y los 40 años, hecho que lo convierte en un material altamente amortizable.

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