Una casa con forma de media luna hace sombra a Stonehenge

Crescent House responde al carácter cambiante de la luz natural y al contacto sensorial con la naturaleza y el paso de las estaciones.

15/03/2016

Wiltshire es un área única en Inglaterra, un condado rural virgen con paisajes salvajes, montañas y bosques de épocas ancestrales. Tiene una herencia arqueológica fascinante, como las enigmáticas construcciones de piedras en Stonehenge y Avebury, además de Old Sarum, Silbury Hill. Entre tales piezas únicas, el despacho de arquitectos Make recibió ...

Wiltshire es un área única en Inglaterra, un condado rural virgen con paisajes salvajes, montañas y bosques de épocas ancestrales. Tiene una herencia arqueológica fascinante, como las enigmáticas construcciones de piedras en Stonehenge y Avebury, además de Old Sarum, Silbury Hill.

Entre tales piezas únicas, el despacho de arquitectos Make recibió el encargo de reformar una casa construida con pocos medios, con una importante cantidad de carcoma y con una construcción térmica ineficiente, además de contar con apenas un par de vistas al jardín. Por si esto fuera poco, durante la demolición se encontraron con que no contaba con fundamentos. “No hace falta recalcar que no había ningún mérito arquitectónico”, bromea Martha McNaughton, líder del proyecto.

Para entremezclar la casa con la localización y reflejar los varios contrastes del lugar, Make Architects partió de un concepto de bloque enraizado fuertemente y de diferentes maneras al suelo. Es una serie de formas simples hechas de cemento en acabado blanco y cristal claro. Internamente, los diferentes espacios se crearon como respuesta a las necesidades del cliente: cada actividad debía tener su propio espacio.

Así, el concepto de diseño tiene dos partes claramente diferenciadas y contrastadas. Hacia el noroeste –donde la casa se junta con los anexos, la carretera y las vistas menos agraciadas–, se presenta una pared convexa translúcida que contiene las áreas privadas. Metafóricamente rechaza los edificios vecinos, aumenta la privacidad y reduce los efectos de los vientos del oeste.

El sudeste, por su parte, está ligado a las vistas maravillosas y al sol, por lo que se presenta de un modo perfectamente contrario: una pared cóncava de cristal claro, con una sugerente forma de media luna o 'crescent' en inglés; he aquí el detalle que bautiza esta casa. Contiene los espacios compartidos y se extiende hacia el paisaje para capturar el jardín y las vistas, ofreciendo el máximo contacto con la naturaleza. Entre estas dos medias lunas, existe una galería de doble altura y un espacio amplio para la circulación.

Una casa con forma de media luna hace sombra a Stonehenge

Crescent House responde al carácter cambiante de la luz natural y al contacto sensorial con la naturaleza y el paso de las estaciones.

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