La cocina se ha convertido en una zona de estar y de paso, en la que compartir y convivir, por lo que su importancia ha ido aumentando cada vez más en los proyectos de decoración.
Utilitaria y funcional, la cocina ocupa hoy en día un lugar propio tanto en el ámbito residencial como en el acondicionamiento de oficinas y residencias hoteleras, e incluso en el sector náutico. Así, ya sea clásica o contemporánea, monocromática o multicolor, la cocina pierde sus paredes para fundirse directamente con ...
Utilitaria y funcional, la cocina ocupa hoy en día un lugar propio tanto en el ámbito residencial como en el acondicionamiento de oficinas y residencias hoteleras, e incluso en el sector náutico. Así, ya sea clásica o contemporánea, monocromática o multicolor, la cocina pierde sus paredes para fundirse directamente con el salón y convertirse en un auténtico espacio para vivir y compartir, en el que la encimera se impone como pieza reina para simplificar la preparación de la comida. En este sentido, Hi-Macs, el material de piedra acrílica de última generación, expresa plenamente su potencial en este escenario, donde estética e higiene se combinan a la perfección. Las cualidades intrínsecas de Hi-Macs lo convierten en el material idóneo para el diseño de cocinas. Al carecer de uniones visibles, proporciona unos acabados con grandes cualidades estéticas y ofrece una higiene impecable. Al ser un material no poroso e impermeable, que no absorbe la humedad, es muy resistente a las manchas y resulta fácil de limpiar, mantener y reparar. A su vez, se trata de un elemento casi tan resistente como la piedra natural, se puede trabajar como la madera, cuenta con excelentes propiedades de termoformado en tres dimensiones y admite una multitud de formas que dan rienda suelta a la creatividad.
Entre esos ejemplos de cocinas que utilizan el material Hi-Macs destaca el pedestal Karan de Rastelli, por Karim Rashid. El concepto gira en torno a una isla abierta, en forma de pedestal, que invita a sentarse alrededor. Las suaves curvas prosiguen en el módulo mural, con una silueta redondeada que delimita el espacio para cocinar y de preparación. El fondo de espejo retroiluminado está rodeado por luces LED, que aportan al conjunto un ambiente propicio para compartir y socializar. A su vez, tanto los muebles del refrigerador y el horno como los de almacenamiento se abren por medio de una ranura vertical. El uso del cristal para las puertas en acabado mate o brillo, además de la cerámica, contribuye a dar más exclusividad a un modelo original y destacable.