Un accesorio de aspecto rústico aporta mucha personalidad al baño. Una personalidad cercana, ori-ginal, práctica y sin mayores pretensiones, conectada con la naturaleza. Toalleros de madera desgastada, cestas de mimbre, cajas reutilizadas, incluso escaleras que sirven como percheros, y cualquier elemento do-it-yourself o con aspecto de do-it-yourself, crearán una atmósfera ...
Un accesorio de aspecto rústico aporta mucha personalidad al baño. Una personalidad cercana, ori-ginal, práctica y sin mayores pretensiones, conectada con la naturaleza. Toalleros de madera desgastada, cestas de mimbre, cajas reutilizadas, incluso escaleras que sirven como percheros, y cualquier elemento do-it-yourself o con aspecto de do-it-yourself, crearán una atmósfera muy personal en la estancia. Los baños del 2018 se caracterizan por una fuerte coneión con la naturaleza, y muchos de ellos logran esta conexión mediante, precisamente, la elección de los accesorios adecuados.
Y es que los muebles actuales son más ligeros, más abiertos, y dejan un mayor protagonismo a los accesorios. Por ello, los colores y los diseños cobran una mayor importancia. Ya sean dispensadores y vasos coloridos, con dibujos o motivos decorativos, u otros de un solo color, ya sea blanco -en tendencia en 2018- cualquier tono pastel o más vivo, deben de estar bien pensados para combinar con el resto de la estancia. En cuanto a los materiales, el diseñador o el cliente final puede optar por jaboneras y portacepillos de acero, de aspecto más sobrio y más frío, de porcelana, los cuales aportan un aire más delicado y suave, o de madera, por ejemplo de bambú, muy originales y naturales, de acuerdo con esa búsqueda de lo rústico de la que hablamos anteriormente.
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