El concepto de comer en el comedor y cocinar en la cocina, como dos acciones completamente alejadas la una de la otra, se ha quedado anticuado. Se acabó el aislamiento de una estancia tan importante como la cocina. Independientemente de si la cocina es un espacio abierto que se comunica ...
El concepto de comer en el comedor y cocinar en la cocina, como dos acciones completamente alejadas la una de la otra, se ha quedado anticuado. Se acabó el aislamiento de una estancia tan importante como la cocina. Independientemente de si la cocina es un espacio abierto que se comunica con el resto de la casa, o no, las familias apuestan por trasladar la mesa y las sillas del comedor a la cocina. Compartir espacio, experiencias y aprendizajes culinarios es un valor en alza para las familias, que quieren aprovechar el tiempo de las comidas, que generalmente es poco, en compañía.
El de las sillas y mesas de cocina es todo un universo, y en los últimos tiempos en él se han introducido materiales muy diversos, que hasta ahora no tan comunes en esta estancia, incluso a los colores ácidos como rojo, verde o amarillo; y por otro lado los colores más sobrios y elegantes, para estilos de cocina con una tendencia minimalista o nórdica. Mesas y sillas que se adaptan a todas las personalidades del cliente y la esencia de cada cocina.
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