Trucos efectivos para aislar tu casa del calor sin que se dispare la factura

Según el marketplace de jardinería y bricolaje ManoMano.es, un buen aislamiento, terrazas y balcones bien acondicionados, y pequeños gestos en nuestra vida diaria (no usar algunos electrodomésticos, poner bombillas de bajo consumo, regar y jugar con los colores, los tejidos y la distribución de los muebles) ayudan a bajar la temperatura en el interior de nuestra vivienda.

10/06/2019

La primera ola de calor ya está aquí y parece que las altas temperaturas han venido para quedarse. Para huir de ellas, la playa o la piscina son las mejores opciones. Ahora bien, ¿cómo podemos escapar del calor en casa? Los expertos de ManoMano.es explican cómo hacerlo evitando que se ...

La primera ola de calor ya está aquí y parece que las altas temperaturas han venido para quedarse. Para huir de ellas, la playa o la piscina son las mejores opciones. Ahora bien, ¿cómo podemos escapar del calor en casa? Los expertos de ManoMano.es explican cómo hacerlo evitando que se dispare la factura de la electricidad. Porque si bien el aire acondicionado es uno de nuestros aliados más recurrentes, su coste energético y medioambiental es muy elevado.

Trucos efectivos y económicos

Los expertos de ManoMano.es recomiendan seguir algunas pautas que pueden ayudar a bajar la temperatura en el interior de la vivienda unos cuantos grados, a la vez que se reduce el consumo energético en casa.

  • Mejorar el aislamiento de tu vivienda. Es una parte fundamental y no solo para el confort del hogar, sino que también influye en la factura energética. Una solución bastante eficaz, y económica, es colocar en los cristales de las ventanas láminas solares que reflejan y reducen hasta un 80% la entrada del calor.
  • Instalar bombillas LED o de bajo consumo. Deshacernos de las luces incandescentes que consumen hasta un 90% de su energía en emitir calor, y reemplazarlas por luz de LED o bajo consumo, ayudará a evitar que suba la temperatura en el interior y reducir la factura.
  • Colocar toldos. Si instalamos toldos en las ventanas en las que entra directamente el sol, podemos bajar la temperatura en el interior hasta 10 grados y conseguir hasta un 60% de ahorro. Las cortinas también pueden ayudarnos a ello. Y si durante el día mantenemos los toldos y persianas cerradas, pero dejando que corra el aire, por la noche la temperatura en el interior no será tan alta, lo que te facilitará un mejor sueño.
  • Terrazas y balcones. Si acondicionamos nuestras terrazas y balcones con buenos materiales y las plantas adecuadas, podemos reducir el consumo energético de nuestro hogar, ya que bajará la temperatura en el interior de la casa. Las plantas también contribuyen a reducir en varios grados la sensación térmica, ya que absorben el calor. Y si para el suelo optamos por un material como la piedra, la temperatura puede bajar unos 3 grados. En definitiva, si la terraza está bien acondicionada, hay estudios que indican que el consumo en aire acondicionado se puede reducir hasta un 40%.
  • Regar las plantas. Tengamos un balcón, terraza, jardín o cualquier tipo de espacio exterior, se recomienda regar a última hora de la tarde para refrescar. Además, las plantas trepadoras como la hiedra o la enredadera y los jardines verticales actuarán como aislante y refrescarán el ambiente.
  • Jugar con las percepciones. Los colores y los tejidos absorben el calor así que si jugamos con ellos podremos reducir la sensación de bochorno. Los colores claros como verdes, amarillos, blancos y azules absorben menos la luz y generan sensación de ligereza y frescor. Por este motivo, utilizar estos tonos en colchas, sábanas y cortinas ayuda a crear un ambiente más agradable. Asimismo, las texturas influyen en la percepción de calidez. Debemos evitar tejidos pesados como pieles, lana o tapices.
  • Modificar la distribución de los muebles. Las zonas de descanso como la cama o el sofá no deben situarse cerca de las ventanas, o bien las persianas deben estar bajadas, ya que debido a sus tejidos absorben el calor muy fácilmente. Por otro lado, para un buen descanso lo ideal es sacar del dormitorio todo electrodoméstico que pueda generar calor.
  • Apagar los electrodomésticos que no usemos. Mantener el televisor, los ordenadores, la lavadora, el horno o el lavavajillas encendidos aumentará hasta 2ºC la temperatura de la estancia. La secadora, por ejemplo, es probablemente uno de los electrodomésticos que más consumen. En ManoMano.es lo tienen claro; aprovechemos el solecito del verano y tendamos la ropa fuera, que se seca enseguida.
  • Elegir un sistema de climatización eficiente. Los ventiladores en todas sus variedades (de techo, de pie, de suelo, de torre, de sobremesa) y los sistemas evaporativos son dos clásicos que no pasan de moda, y si no disponemos de aire acondicionado, ayudan a refrescar el ambiente. Los primeros, los ventiladores, producen una sensación de descenso de la temperatura de entre 3 y 5ºC, y su consumo de electricidad es muy bajo. En cuanto a los sistemas evaporativos, también refrescan el ambiente unos pocos grados con poco consumo energético.

Y si aun con todo, el calor sigue haciéndose insoportable, los expertos de ManoMano.es recomiendan que para evitar sustos en la factura, lo primero y más importante es no ajustar la temperatura más baja de lo normal. El IDEA, Instituto para la Diversificación y el Ahorro, recomienda fijar el aire acondicionado en no menos de 26 grados, y apunta que cada grado que se disminuye la temperatura del aire acondicionado, se incrementa en un 8% el consumo de energía.

Cookie Consent

This website uses cookies or similar technologies, to enhance your browsing experience and provide personalized recommendations. By continuing to use our website, you agree to our Privacy Policy

Nuestros Podcasts