Una vez más el covid-19 cobra protagonismo en evento internacional. En esta ocasión, de la 14ª edición de MedaWeek, `la Semana Mediterránea de Líderes Económicos´ (Mediterranean Week of Economic Leaders), uno de los eventos de referencia para promover las economías mediterráneas, la cooperación empresarial y la región mediterránea en todo el mundo.

Como han avanzado en la presentación, en el encuentro de este año cobra especial relevancia el sector salud como consecuencia de la pandemia. En este sentido, Anwar El-Zibauoi, coordinador de la Asociación de Cámaras de Comercio e Industria del Mediterráneo (ASCAME), destaca que, a pesar de una situación complicada, añadida a otros problemas previos, MedaWeek sigue resistiendo. "Cada año es un verdadero desafío, hemos visto como muchos de nuestros amigos de la región que han organizado eventos similares no han resistido más de 3 ediciones. Intentamos año tras año reinventarnos".

Además, El-Zibaoui hace hincapié en que Europa tiene una oportunidad histórica para incidir en el desarrollo del Mare Nostrum. "El destino de Europa y África está vinculado, y el Mediterráneo es el espacio natural de este eje. Hay que aunar las voluntades, defender los intereses convergentes, apostar por una mejor cooperación. Hay que romper con los miedos y dibujar el futuro de las próximas generaciones".

Potenciar lo que nos une
En este sentido, agrega que, aunque en el Mediterráneo "no podemos borrar lo que nos hace diferentes", seguro que hay caminos para que estas diferencias sean una fuente de potencial de riqueza.

Así, debe convertirse en un elemento de competitividad y una ventaja comparativa en relación a otras regiones y economías del mundo. "Es posible unirnos para crear un nuevo destino que construya el logro de la prosperidad. El crecimiento, la paz y la estabilidad para toda la región, como hace 25 años se proclamó desde la Declaración de Barcelona. Esta ciudad preferencia de un de Mediterráneo que debe ser más justo, más equitativo, más inclusivo. Que el diálogo sea el recurso más valioso, y la política el arte de construir consenso y puentes sin suprimir las diferencias".

Por su parte, Joan Canadell, presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, valora "la voluntad de recuperar el diálogo entre los países de la cuenca mediterránea" que supuso Barcelona 1995, pese que en su opinión, "el resultado no se ha situado a la altura de las expectativas de los pueblos y las regiones, ni tampoco de los retos a los cuales se debe confrontar la comunidad internacional en dicha región". Alerta que lo que está en juego "es mucho", y que "se necesita un nuevo enfoque europeo, una nueva visión y la voluntad política suficiente para poder hacer frente a los múltiples retos".

Asimismo, resalta que la pandemia ha puesto de relieve la interdependencia de nuestras economías, "por eso ha llegado el momento de pensar una vez más la relación entre la UE y el mediterráneo, impulsar juntos un proyecto para compartir en un momento cada vez más centrado en crear áreas regionales y económicas a gran escala".

Para Jaume Collboni, primer teniente de alcalde el Ayuntamiento de Barcelona, el evento tiene "un gran valor añadido", que sean las cámaras de comercio locales las que articulan este espacio de colaboración, de cooperación y de intercambio de puntos de vista. "Creo que aportan el valor de la proximidad, del conocimiento del terreno", señala. Este espacio europeo, como el espacio mediterráneo históricamente, "nos deberíamos remontar a los orígenes de la cuna de la civilización basada y considero que este espíritu se mantiene a lo largo de los años con esta asociación y con este encuentro que celebra su 14ª edición".

Seguidamente, Ahmed M. El Wakil, presidente de la Asociación de Cámaras de Comercio e Industria del Mediterráneo (ASCAME), destaca en primer lugar los 35 foros temáticos, más de 650 sesiones de trabajo y 2000 oradores que participarán MedaWeek. También recuerda que hoy se celebran los 25 años del aquella Declaración de Barcelona, pero también "que estamos en un mundo distinto, en una época diferente y un tsunami ha azotado todo el planeta y nos sigue azotando en la región mediterránea".

El "tsunami" del coronavirus
A este respecto, añade que "el covid ha explotado en todas las actividades económicas, ha desestructurado las cadenas de suministro y las finanzas. El mediterráneo ha caído un 11% de su PIB. Nuestras actividades marítimas han perdido un 21%, se han perdido 450 billones de dólares, lo que representa el 20% de la producción marítima global en una zona que ocupa solo el 1% de los mares del planeta. El comercio mundial se ha ralentizado casi un 30%, y esto ha afectado a los flujos comerciales inter mediterráneos".

De la misma forma, "las medidas que se han adoptado no han sido suficientes para evitar la caída de la demanda comercial de la industria y de los servicios. Todo ello nos lleva a tener una serie de cuestiones en la zona euromediterránea, y sabemos como mínimo, que va a ser muy complejo la recuperación de las inversiones".

Y sin embargo, asegura que "como comunidad no vemos problemas, vemos oportunidades", ya que el Mediterráneo "está posicionado para convertirse en un lugar único más allá de poder conseguir conexiones con otros mercados de todo el planeta y además conectar con un mercado de 500 millones de habitantes".

Al mismo tiempo, continúa el director de ACAME, "nos presenta una oportunidad de tener nuevas infraestructuras para estimular el comercio en estos mercados y varias conexiones en distintas zonas comerciales". Por lo tanto "es necesario en la región mediterránea contar con un papel activo en ese sentido, no podemos estar de brazos cruzados. Debemos tener la capacidad de ser reactivos siempre que sea posible".

Optimismo que también quiere transmitir Pere Navarro, delegado especial del Estado en el Consorci de la Zona Franca de Barcelona. "Tenemos la posibilidad de que en pocos meses podamos superar la pandemia, y ahora lo importante es ser un poco positivos dentro de la tragedia humana y económica que estamos viviendo en todo el mundo".

Bajo su punto de vista, estas jornadas deben transmitir este optimismo. "A pesar de lo mal que lo estamos, de las dificultades, y de todas las personas que están sufriendo, hay empresas, instituciones y asociaciones que están trabajando para acelerar procesos que ya existían anteriormente y los están poniendo en marcha para la ciudadanía.

Estos procesos tienen que ver con las oportunidades, "algo que ya aparecía anteriormente". De hecho, agrega, "el eslogan de MedaWeek dice `Time to act, stronger together´ (Tiempo de actuar, juntos somos más fuertes)". Por eso, apostilla Navarro, "no solo tenemos que reivindicar aquel Mare Nostrum de la historia, sino tambiém la alianza que significa esto. MedaWeek ha mantenido encendida esta luz de la alianza en el mundo del Mediterráneo".

El comercio exterior, clave para el futuro
Para finalizar, Reyes Maroto, ministro de Industria, Comercio y Turismo de España, apunta que dado que desde el inicio de la pandemia, "el mundo y en particular la región mediterránea" está viviendo momentos difíciles, "en estos momentos debemos reforzar la cooperación y la colaboración entre los países mediterráneos para afrontar la recuperación económica y la mejora del bienestar social". Ejemplo de ello es, en su opinión, "este un foro de líderes donde presentar iniciativas para lograr un mayor desarrollo socioeconómico de nuestra región".

De la misma forma, la ministra comparte la hoja de ruta del gobierno de España "para mirar con confianza el futuro". Detalla que hace unas semanas, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, presentó el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, "un ambicioso programa de inversiones y reformas para una reconstrucción social sólida, inclusiva y resiliente tras el covid-19. Y para responder a los retos de las próximas décadas".

Reyes Maroto, ministro de Industria, Comercio y Turismo de España.

Las medidas impulsadas por el Ejecutivo se fundamentan en que "queremos afrontar el futuro con la participación de todos, y esa debe ser la clave del éxito. Solo unidos podemos abordar las transformaciones que estaban pendientes, como la digital, la transición ecológica, la brecha de género o la cohesión social y territorial". En este sentido, señala Maroto, una de las palancas de la recuperación de nuestras economías será el comercio exterior. "Según las estimaciones de la OMC, el comercio mundial logrará un aumento significativo del 7,2% en el próximo año".

Por eso asegura estar convencida de que en los próximos meses "impulsaremos las relaciones comerciales de inversión entre nuestros países", sobre todo porque "partimos de bases sólidas, y las posibilidades de desarrollo e inversión en esta enorme zona que incluye gran parte de África son inmensas para España y para Europa".

Además, la portavoz del Gobierno recuerda que "nos unen fuertes lazos históricos e intensos intercambios económicos y culturales". Por todo ello, "seguiremos avanzando con más apertura en toda el área en beneficio de todos, porque el comercio internacional acelerará la recuperación de nuestras economías. Que vuelva a ser un área de diálogo donde se fomente el crecimiento mutuo y sostenible, alineado con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas".

FOTO PRINCIPAL.: 14ª edición de MedaWeek.