El Instituto Tecnológico está acreditado para certificar la emisión más restrictiva, que ostenta California.
El Instituto Tecnológico del Mueble, Madera, Embalaje y Afines, Aidima, desarrolla, junto a seis socios europeos, una nueva tecnología basada en un sensor para controlar desde la misma línea de producción el contenido de formaldehído de los tableros y productos derivados. Se trata de un gas que se utiliza en ...
El Instituto Tecnológico del Mueble, Madera, Embalaje y Afines, Aidima, desarrolla, junto a seis socios europeos, una nueva tecnología basada en un sensor para controlar desde la misma línea de producción el contenido de formaldehído de los tableros y productos derivados. Se trata de un gas que se utiliza en los adhesivos para dotar de consistencia a los tableros derivados de la madera, y es también utilizado en multitud de procesos industriales, como en automoción. Es el causante de ese característico “olor a nuevo” de los productos en los que se aplica por su gran volatilidad y está considerado peligroso para la salud humana en determinadas circunstancias de exposición y grado de emisión, como así lo recoge la Organización Mundial de la Salud (OMS). El proyecto, denominado WoodSens, está financiado por los Fondos Feder y el Impiva. La emisión de formaldehído en los tableros y productos que los contienen se encuentra bajo el control de numerosa de legislación, que exige cada vez valores más bajos de emisión, al tiempo que deben mantenerse las prestaciones mecánicas y de estabilidad de los materiales. Esta exigencia obliga a los fabricantes de resinas formuladas con formaldehído y los fabricantes de tableros a realizar permanente investigación para restringir las emisiones, donde los controles periódicos que realiza en este ámbito Aidima son imprescindibles para cumplir las distintas legislaciones.