Cuando el termómetro sube, nuestro espacio exterior se convierte en un refugio ideal... siempre que sepamos cómo prepararlo. Con unas pocas ideas bien pensadas - y sin necesidad de grandes reformas -es posible transformar cualquier terraza, balcón o jardín en un entorno fresco, acogedor y muy disfrutón. Sigue las indicaciones ...
Cuando el termómetro sube, nuestro espacio exterior se convierte en un refugio ideal... siempre que sepamos cómo prepararlo. Con unas pocas ideas bien pensadas - y sin necesidad de grandes reformas -es posible transformar cualquier terraza, balcón o jardín en un entorno fresco, acogedor y muy disfrutón. Sigue las indicaciones que comparten desde Leroy Merlin para lograrlo:
Césped artificial
Revestir el suelo exterior con césped artificial es una solución tan efectiva como agradecida. Aplicado sobre baldosa o cualquier superficie dura, mejora el confort térmico, embellece al instante y permite caminar descalzo sin quemarse los pies.
Solo hace falta colocar una banda de unión y el césped encima para crear, en minutos, una zona chill out. Con unos cojines o una tumbona, el rincón de verano está listo.
Un plus: el color verde genera una sensación térmica más baja. Pura psicología del confort.
Descubre cómo hacerlo aquí y cepíllalo para levantar las fibras.
Sombras inteligentes
Una sombra bien colocada refresca y transforma cualquier exterior. Los toldos vela, ligeros y decorativos, se instalan fácilmente con tensores o anclajes.
Tip: combinarlos en distintos niveles y colores suma frescor y estilo.
Jardín vertical
Son una solución sencilla y decorativa para refrescar exteriores sin ocupar espacio. Las plantas ayudan a reducir el calor al absorber parte de la radiación solar y aumentar la humedad ambiental, lo que mejora la sensación térmica en días de mucho sol.
Consejo: colocarlo en una pared o barandilla soleada no solo embellece, sino que aporta privacidad de forma natural, lo que lo convierte en una forma eficaz de ganar intimidad y frescor al mismo tiempo.
Piscinas desmotables
Son la solución estrella para quienes buscan un respiro del calor sin complicarse con obras.
Pero el entorno también cuenta: el suelo alrededor puede calentarse en exceso con el sol, e instalar una tarima exterior, de madera o composite, ayuda a evitarlo. Además de mejorar la estética, creará una base fresca, cómoda y antideslizante.
Idea: combinarlas con plantas, sombrillas o mobiliario ligero, suma confort y ambiente.
Agua y nebulizadores
En días de mucho calor, los nebulizadores se convierten en un auténtico salvavidas para cualquier zona exterior. Este sistema, fácil de instalar, se conecta directamente a una manguera y pulveriza agua en microgotas que se evaporan al instante, reduciendo la temperatura sin mojar.
Ventaja: pueden colocarse en pérgolas, toldos, sombrillas o incluso barandillas. No requieren presión alta ni obras previas, y convierten cualquier zona exterior en un entorno más fresco y agradable.