La mampara y el hidromasajeson dos subsectores unidos por la funcionalidad. Y es que se trata de dos componentes del baño a los que el consumidor pide una gran practicidad: el caso de la mampara, debe ser, sobre todo, estanca y fácil de limpiar; en el caso del hidromasaje, simplemente cumplir su función sin necesidad de un gran mantenimiento.

Ser invisibles, o lo más discretos posible, pero estar allí cuando se les necesita. Pues bien, los modelos actuales cumplen con esta misión de una manera exquisita. Transparencia, libertad y perfilerías finas y minimalistas, en el caso de la mampara, y jets ocultos pero potentes, en el del hidromasaje.

Decíamos que la tendencia en el campo de las mamparas pasa por la transparencia: las amplias superficies sin perfilería o con una perfilería elegante y minimalista están de moda. Para lograr este efecto, las empresas del sector han diseñado sistemas de cierre y apertura, ya sean correderos o no, y sistemas de anclaje muy sofisticados técnica y estéticamente.

Otra de las grandes tendencias que se afianzan y mejoran temporada tras temporada gracias a los esfuerzos depositados en el I+D de los fabricantes del sector es la de incorporar, mediante la técnica de la impresión digital, aquellos diseños que el interiorista o el cliente final demande.

Si hablamos de satisfacer los anhelos del comprador final, hablaremos automáticamente del hidromasaje. Un elemento que se ha hecho un hueco en el corazón, y en el baño, de muchos consumidores.  A la hora de reformar, por ejemplo, un sistema de hidromasaje es algo que puede dar un plus de ilusión y de lujo al baño, convirtiéndolo en el espacio soñado y deseado más allá de la estética o la funcionalidad. 

Ahora, la atención se centra en sus efectos: una ducha revitalizante para comenzar bien el día, o una ducha relajante antes de acostarse, son los dos fines básicos que persiguen los distintos jets, rociadores y programas que ofrecen los fabricantes en este 2014. Rituales, los del baño, que se reproducen también en los sistemas de hidromasaje para bañeras. En estos casos es sobre todo la relajación, la evasión del estrés del día a día, la meta perseguida. Y, una vez más, encontramos unos diseños cada vez más discretos, con jets y mandos casi invisibles, estos últimos muy intuitivos y sencillos de utilizar, que esconden una tecnología muy avanzada.