IMCB nº146

9 se trata de una península. Estos dan cobijo a los electrodomésticos como microondas, horno y nevera, sirven para lograr un espacio extra para el almacenaje y, en ocasiones, albergan el mueble desayunador, que aparece visible mostrando los pequeños electrodomésticos como cafetera, molinillo, tostadora o exprimidor junto con el menaje de desayuno correspondiente u, de lo contrario, invisible cuando no se están utilizando. De este modo, podríamos instalar una persiana o unas puertas escamoteables que, una vez se abren, quedan recogidas en los laterales del mueble, proporcionando una panorámica completa de lo que allí se guarda, unas de tipo corredera o unas extraíbles, que se caracterizan por traer consigo una parte de los mecanismos que las contienen, tal y como ocurre en las referencias que reproducen el modelo despensa o nevera, compuesto por unos estantes en los que almacenar productos en envases cerrados tanto en el contenedor interior como en los compartimentos que van alojados en la puerta. Abracadabra Los sistemas que se ofertan en el mercado para la apertura de las alacenas son muchos y diversos. Están los tiradores longitudinales de mayor o menor extensión o los de formato recogido (concha, pomo o asa). También nos puede interesar que queden camuflados haciendo uso del sistema gola, un perfil metálico anclado de forma lineal en vertical u horizontal en el módulo de la cocina, pudiendo aparecer en la misma tonalidad que el frente del mobiliario o en otra diferente para crear contraste. La principal ventaja es la sensación de limpieza y ligereza visual que transmite. Algunos incorporan iluminación. El uñero deja el sitio suficiente como para introducir los dedos para tirar y abrir con facilidad y se encuentra integrado en el mueble, por lo que se realiza una pequeña hendidura en el frente. Otro ejemplo a considerar es el push-pull, que destaca por su innovación al abrir al toque. Basta con establecer contacto con la puerta o el cajón y estos abrirán como por arte de magia. Ahora que los hogares inteligentes y conectados están ganando una mayor popularidad entre la población, los sistemas de apertura parecen beneficiarse de esta tecnología al apostar por una apertura electrónica mediante un toque y el cierre con botón. Una alternativa a tener en cuenta para personas de estatura media, que no tendrán que subirse a una banqueta para cerrar la puerta del mueble superior, o para aquellos casos en los que exista una movilidad reducida que dificulte levantar mucho los brazos. Si echamos un vistazo a los datos, observamos que este mercado sufre altibajos. La evolución de la producción se encuentra al alza, llegando a los 248 millones de euros, lo que supone casi un 16% más que el año anterior. Sus exportaciones siguen la misma trayectoria que su predecesora con un incremento de un 36,61%, lo que se traduce en 41 millones de euros más que en 2021. Si nos centramos en el apartado de las importaciones, vemos como estas se sitúan en puestos de descenso con caídas que superan el 12% (248 millones de euros). El mercado interior aparente tampoco muestra buenos resultados, ya que ha perdido unos 43 millones en 2022. Si comparamos estos resultados con los obtenidos antes de la pandemia comprobaremos que existe algo de mejoría en las cifras en lo que respecta a la evolución de la producción y en las exportaciones. El despertar del tirador: de lo sutil a la totalidad El patrón que más se repite es el de la convivencia entre estilos dispares. Cocinas abiertas o cerradas, grandes o pequeñas, luminosas u más oscuras se rigen por la mezcla estética. Por poner un ejemplo, los tiradores metálicos a todo largo en horizontal para cajones y muebles altos y en vertical para puertas y columnas están de moda. Se rompe con la linealidad, añadiendo un toque de originalidad. La sostenibilidad está presente no solo empleando la madera certificada para la fabricación del mobiliario o el uso de materiales reciclables, sino que se percibe en los tiradores, que se pueden adquirir en madera o directamente <<Hettich

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