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instalación y montaje en cocinas y baños      
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La empresa, situada en la meca de la co-
cina germana, en la ruta de oro que une
Verl y Löhne, es una de las representantes
más claras de lo que es la industria del
mueble de cocina alemán: una compañía
sólida y potente, seria e innovadora, que
ofrece calidad y precisión, tanto en el
diseño como en el servicio.
Nacida hace más de medio siglo como
empresa familiar, ha logrado convertirse
en un gigante que facturó en 2011 850
millones de euros y que da empleo di-
recto a 2.357 personas repartidas en dos
plantas en las que se producen 535.000
cocinas al año.
Un gigante, como decimos, pero que tie-
ne los pies bien anclados a la tierra. Sus
productos se definen por una relación
calidad-precio excelente, y su equipo de
I+D ha conseguido conectar con el con-
sumidor y desarrolla de manera precisa
modelos exitosos.
De hecho, con solo siete de sus modelos
de frentes consiguen llevarse un 23% del
mercado alemán.
Ventajas para el distribuidor
Sin embargo, esta relativa garantía de
éxito que ofrece a su red de distribuición
no es el único argumento que Nobilia
argulle para convencer de sus ventajas a
presentes y futuros distribuidores.
Su completa colección, que alcanza un
80% del mercado, desde las cocinas más
modernas a las más clásicas, sin olvidar
las campestres y mediterráneas, hace
posible que el vendedor utilice solo una
lista de ventas, sin necesidad de alternar
entre varias diferentes según los deseos
de cada cliente.
De esta manera, el distribuidor podrá
vender sus productos de una manera más
segura y sin los errores que se pueden
producir por no conocer bien las carac-
terísticas de cada lista.
El 2011, un buen
año para Nobilia
Como una gran torre que desafía la tor-
menta, Nobilia parece ser inmune a la
situación económica general. Es más, en
2011 consiguió crecer un 8,6%, superan-
do así su propia tasa de crecimiento de
los últimos años.
Gracias a ello, la compañía mira al futuro
con prudencia, pero optimismo. En sus
planes está la ampliación de la capacidad
productiva de la planta Verl-Kaunitz,
inaugurada hace solo seis años, y el cre-
cimiento de la exportación.
Y es que la exportación ha sido, es y
parece que será la gran baza de Nobilia
también en el futuro. Como si lo llevara
en sus genes germanos, Nobilia exporta
a la friolera de 67 países el 38,2% de su
producción, lo que, en 2011, supuso
unos 325,1 millones de euros. Un 4% de
ellos provinieron de España, donde la
empresa no ha previsto ningún cambio
en su estructura de distribuición pese a
la crisis que sufre el país.
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El consejo del experto
El consejo de Nobilia a los fabricantes españoles es claro y preciso: no esconder la
cabeza, no recortar costes de manera drástica en conceptos como el marketing;
esto puede ayudar en un primer momento, pero no asegura el éxito a medio plazo.
Por el contrario, hay que revisar los propios procesos y pensar concienzudamen-
te dónde hay potencial de mejora, para poder reaccionar adecuadamente a los
cambios de la situación: qué es mejorable a nivel de comunicación, de relación
con el cliente, cómo adecuar el surtido de productos, o mejorar la imagen del
negocio, tanto la externa como la interna, con el fin de reflejar competitividad
y confianza. Y, por último, confiar en centrales de compra o asociaciones, que
cuentan ya con estrategias probadas en una larga experiencia.