En el 2018, el ramo ha registrado una cuota de exportación equivalente al 50%, en crecimiento hacia Francia, donde exporta un quinto de sus productos (es el primer país de exportación, con un valor de 2,5 millardos de euros) y hacia Alemania y los EE.UU. (+7%), que representan el primer mercado fuera de la UE con un valor de 1,5 millardos de euros. El Reino Unido, en cambio, que es el cuarto país para las exportaciones italianas de mobiliario de diseño, el año pasado fue negativo (-2,3%), haciendo sentir en cierto modo los primeros efectos del «Brexit».

Así pues, la industria del mueble italiano sigue manteniendo perspectivas de crecimiento hacia el extranjero muy significativas (sobre todo en el segmento de alta gama). Según las estimaciones más recientes, para el 2022, las exportaciones italianas podrían aumentar en casi 700 millones de dólares. Frente a las necesarias y cada vez más estratégicas aperturas de la industria de la cadena productiva hacia los mercados internacionales, el panorama que SICAM ofrece cada año es realmente un recurso extraordinario. Han sido nada menos que 104 los países de procedencia de los buyers y de los operadores que se registraron el año pasado en la feria, con aumentos significativos detectados especialmente en mercados como Canadá y los Estados Unidos, Corea y Japón. Rusia y China representan en Pordenone las dos procedencias más populares de las zonas no comunitarias, mientras los países europeos más representados siguen siendo Alemania, Francia, España y Gran Bretaña.

La prueba de fuego para comprender cuáles son los puntos con mayor perspectiva para la industria del mueble italiano ha sido el último Salón del Mueble de Milán. La presencia asiática era mayoritaria, con muchísimos visitantes chinos, pero también ha sido muy fuerte el retorno de Rusia y Brasil, que demuestra el interés de estos mercados hacia los productos del mobiliario italiano, con la confirmación de los mercados tradicionalmente más seguidos: Alemania, Francia y los EE.UU.

China especialmente sigue mostrando su enorme potencial. Actualmente representa el séptimo mercado de exportación para las industrias italianas, un valor de aproximadamente medio millardo de euros, pero según los analistas en los próximos cinco años podría situarse entre los tres primeros.