El sector del comercio, tienen una gran relevancia en la economía española. Concentra el 17% de las afinidades en la seguridad social y los efectos negativos, serán más destacados, llegando a incidir en un 30% de valor agregado del PIB.

El coronavirus está produciendo efectos a todos los niveles, aunque hay sectores como los distribuidores de bienes de primera necesidad, que han conseguido despuntar. ¨Actualmente el sector, afronta un futuro lleno de complejos y muy condicionado por las medidas de distancia social y sanitaria, así como el impacto en la crisis tanto de las rentas y de la confianza de los mismos¨, declaró Antonio Garamendi, presidente de la CEOE, en la presentación de la primera mesa de la cumbre.

Para abordar la situación del comercio y su futuro, han intervenido; Marc Puig, Presidente de Puig y del Instituto de Empresa Familiar; Fuencisla Clemares, Directora General de Google España; Pedro Campo, Presidente CEC (Confederación Española de Comercio); Aurelio del pino, Presidente de ACES (Asociación Española de Cadenas de Supermercados); Alfonso Merry del Val, Presidente de Anged. Asociación Nacional Grandes de Empresas de Distribución; y Antonio Garrigues Walker, Presidente de ASEDAS Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados.

¨Las ventas de Puig, a nivel internacional son de un 85%, en abril las ventas, bajaron un 87% y en mayo un 75%, respecto al año anterior¨, indicó Puig, cómo afectó y afectará el coronavirus a nivel comercial. ¨Respecto a esta pandemia, sabemos que muchas empresas no saldrán, pero lo importante es canalizar todos los recursos, para conseguir que la mayoría de esas empresas, puedan sobrevivir¨, argumentó y explicó que, a pesar de la baja de las ventas, ¨Puig piensa en el futuro y compró la empresa cosmética Charlotte Tilbury. Marca de referencia a nivel internacional¨.

Puig durante su intervención preguntó, ¨¿Por qué lleva España tanto tiempo en cabeza respecto a los niveles de paro en Europa?¨, a lo que contestó que es debido a, ¨no tener un fuerte tejido empresarial y no permitir que las pequeñas empresas, pasen al siguiente nivel¨. En Alemania hay mayores empresas grandes y por ese motivo, ¨a diferencia de España, tienen mayor productividad¨, subrayó Puig.

La tecnología es una de las herramientas que mayor aportó al comercio y tal como indicó Clemares, ¨desde Google, hemos visto un repunte en el comercio minorista en la red. La venta online, aumentó en hogares que nunca habían comprado y esto ayudó a las empresas más pequeñas¨. ¨Google vio la evolución de las empresas españolas en el comercio y piensa que este crecimiento se está haciendo de una manera sostenible, y creando riqueza¨, apuntó.

¨Comparando con Europa, España tiene un modelo de comercio más automatizado¨, defendió Campo y dió un dato, que permite comprender mejor cómo es la situación española en el comercio y es que, ¨las empresas con menos de 10 trabajadores son el 44%, respecto el 34,1 de la media de Europa¨. Según Campo, las perspectivas para la nueva normalidad, ¨será haciendo nuevas campañas para reformar el comercio y favorecer el consumo¨.

Las grandes compañías de supermercados, han sido héroes durante la pandemia y en la opinión del Pino, ¨los supermercados han tenido que trabajar, desde la incertidumbre, la inseguridad jurídica, siendo muy proactivos y sabiendo que había que cumplir una gran acción, que era dar, los bienes de primera necesidad a la población¨. Del Pino, durante su intervención, reclamó a las administraciones, ¨un marco normativo laboral, para conseguir la flexibilidad laboral y una formación real para los empleados, es decir, un convenio estatal de los supermercados¨,

¨Es necesario hacer un pacto para abrir domingo y festivos durante 2020¨, apuntó del Val y añadió que, ¨los efectos sobre el empleo serán demoledores y la economía será un caldo de cultivo para el populismo que comprometen las libertades¨. Del Vel, criticó la actuación del Gobierno, debido a que, ¨han pasado cuatro meses y no hay un plan concreto y claro para la reconstrucción¨.

La primera sesión de la cumbre, fue cerrada por Walker, reclamando por su parte, ¨seguridad jurídica¨, y, ¨defendiendo un pacto social y solicitando que la política no se puede separar de la economía¨.