Alemania es uno de los mayores fabricantes de muebles a nivel mundial y el mayor en Europa. Según datos del ICEX, copó un tamaño de mercado en 2020 de 22.124 millones de euros y, a pesar de la pandemia, es un mercado que se mantiene estable con los años. Cocinas ...
Alemania es uno de los mayores fabricantes de muebles a nivel mundial y el mayor en Europa. Según datos del ICEX, copó un tamaño de mercado en 2020 de 22.124 millones de euros y, a pesar de la pandemia, es un mercado que se mantiene estable con los años.
Cocinas de alta durabilidad
Si algo define a los muebles alemanes es la resistencia. Son piezas de alta calidad y durabilidad, cuya vida útil mínima son 20 o 15 años. Algo que aporta seguridad total en la cocina gracias a sus procesos de fabricación muy bien trabajados y con calidades siempre certificadas. A ello se suma la funcionalidad y un diseño moderno que tiene en cuenta las necesidades de los huéspedes actuales. Se busca la simplicidad de elementos para que cada mueble pueda usarse de forma fácil. Destaca el mobiliario a diferente altura, islas centrales y elementos distintos para crear espacios diferenciados dentro de la misma cocina.
Las cocinas alemanas tienen en cuenta cada detalle, y se adaptan a las necesidades de aquellos que pisan este espacio varias veces al día, puesto que no son lugares destinados únicamente para cocinar, sino que son mucho más: centros de reunión y de experiencias gastronómicas, el eje central de las casas actuales. Por esta razón, los diseñadores alemanes tienen en cuenta la practicidad en la fabricación de sus muebles, electrodomésticos, accesorios y el resto de elementos que conforman una cocina.
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