Miele presentó el pasado jueves, 5 de marzo, su nueva gama de lavavajillas. Cristina Reque, directora de Marketing, recordó que la firma celebrará el próximo año 50 años en España. Ella y Pilar Lucena, del departamento de Marketing y Publicidad, compartieron con los asistentes un reto en el que los nuevos dispositivos lavaron una vajilla que había estado una semana macerando suciedad reseca.

Antes  de ello, Sven Luce, jefe de producto de Miele,  explicó las características de los nuevos electrodomésticos. “Miele introdujo hace 85 años el primer lavavajillas de uso doméstico de Europa. Lo que más llamó la atención fue la bandeja portacubiertos, que la patentamos en 1987. A día de hoy, no hay ninguna marca que no tenga la bandeja portacubiertos. Nosotros tenemos ahora la 3D, que es la más flexible del mercado”, dijo. Comentó que los sondeos, hechos por la propia Miele, arrojan que a los usuarios les preocupa, por orden de preferencia: flexibilidad, duración de los programas, nivel acústico, facilidad de uso y eficiencia energética (agua, energía y durabilidad). “Todo ello lo hemos tenido en cuenta para los nuevos lavavajillas”, afirmó. A renglón seguido, habló de las características. El sistema ConfortClose ofrece comodidad. Con el AutoOPen, una vez acabado el programa, se abre la puerta sola. De esta manera, se acaba con la humedad y la vajilla estará perfectamente seca. Con el programa Silence Plus, sólo hay 38 decibelios de ruido. Con BrillantLight, hay luz. DetergentAgent detecta el detergente y hace ajustes para el lavado. El consumo ronda los 6,5 litros (consiguen que sea 5,5) y es A+++. Asimismo, hay un nuevo programa por el que el cesto inferior recibe un lavado intensivo, con mayor presión de agua para mayor limpieza. Por otro lado, el depósito de sal está integrado en la puerta, por lo que no hace falta agacharse. “Esto está teniendo mucho éxito, sobre todo en las zonas costeras”, comentó Luce. “Hemos mejorado la flexibilidad de los cestos. Cualquier tipo de menaje cabe de forma perfecta”, añadió. “El 95% de los usuarios enjuaga la vajilla antes de meterla en el lavavajillas. Ahora, no es necesario hacerlo con un lavavajillas de Miele. Tenemos una nueva gama, más competitiva que nunca. El cliente dirá que con esto puede conseguir con facilidad el resultado perfecto”, concluyó.

Abraham Menéndez, ilustrador de Abe the Ape, narró que Miele le llamó para hacer una vajilla efímera como reto. El objetivo era que no se fuera la costra. Mostraron el proceso y se vio que finalmente sí se fue la costra. Allí recordaron que el enjuagado previo es una costumbre común en los hogares españoles. En el 94% de ellos, se lleva a cabo este paso antes de meter la vajilla en el lavavajillas. El enjuagado supone no sólo un esfuerzo para el usuario, sino también un gasto extra de agua y energía, que tiene sus días contados con la nueva gama de lavavajillas Miele, una serie de aparatos de máxima calidad, que consiguen unos resultados perfectos en el lavado y cuidado de la vajilla, sin necesidad de enjuagarla previamente.