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instalación y montaje en cocinas y baños
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editorial
IM Instalación y Montaje
en cocinas y baños
nº 69 MARZO-ABRIL 2013
Director:
Angel Salada
Redactora Jefe:
Rosa Gracia
Redacción:
Carla Prats
Redacción online:
Helena Sanglas
Colaboradores:
Almudena Caballero, Helena Sanglas,
Paula Recarey, Jorge Cruz,
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Luis Marchal, Fran Mendiola
y Clara Pariente
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Número 69 Año 2013
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Cocinas a la medida del hombre
Las cocinas son femeninas. Sí, la mayoría lo son. Fueron diseñadas pensando en femenino,
porque la inercia histórica ha llevado a la mayoría de diseñadores y fabricantes, casi siempre
hombres, a esforzarse en proponer soluciones al supuesto gusto y necesidades de “usuarias”,
y no de usuarios, de tan esencial espacio del hogar.
En los últimos tiempos, con el papel socializador que han vuelto a adquirir las cocinas –un
significado perdido sólo a lo largo de las últimas décadas, pues antes ya era uno de los lugares
de vida de las familias-, se ha tenido en cuenta el concepto “familia” para complementar el
de “usuaria”. Sin embargo, el concepto de “usuario” parece poco atendido.
Definitivamente, el hombre ha entrado en la cocina, así que bueno sería plantearse los gustos,
necesidades y otras inquietudes del sexo masculino. Cómo es la cocina ideal de las señoras
es una pregunta que se han hecho muchos durante muchos años y cuyas respuestas están
presentes en el mercado. Ahora es el momento de preguntarse por la cocina ideal de los
señores. No es ninguna broma, más bien es una posible línea de negocio. ¡Hay que reinventar
la cocina para adaptarla al hombre!
Cada día son más los hombres en todo el mundo que se ponen al frente de la cocina de
casa. Otros muchos no lideran los procesos culinarios de la familia pero sí se han adentrado
en la cocina para “ayudar”. Pocos son, y cada vez serán menos, los que frenan sus pasos
ante el marco de la puerta de la cocina para, simplemente, esperar que les sirvan suculentos
platos calientes.
Ante esta realidad, ¿qué ha cambiado en las cocinas para que el hombre no sienta lo que
siente cuando se cuelga del cuello un delantal floreado? No, no se trata de afirmar que el
hombre se siente incómodo con ese delantal o con esa cocina pensada y creada en clave
femenina. La cuestión es tan simple como preguntarse si además de no sentirse incómodo,
podemos dar pasos para que se sienta cómodo y disfrute, que sienta que aquel espacio lo
es también para él.
Fíjese bien que el tema no es exclusivo de la cocina. Infinidad de otros espacios fuera del
hogar están siendo utilizados por hombres cuando han nacido pensando en mujeres. La
mayoría de centros de estética o las peluquerías son dos ejemplos de ellos. Las hay con el
cartel de unisex, pero pocas son las que han sido de verdad pensadas bajo ese precepto.
Semanas atrás un amigo me decía que estaba pensando en abrir un centro de belleza sólo
para hombres. Le pregunté por qué sólo para hombres y su respuesta fué “porque no hay”.
Le hice la reflexión: ¿Y es necesario que los haya, que clasifiquemos y separemos? ¿No
bastaría con pensar en un espacio donde tanto la mujer como el hombre pudieran sentirse
confortables y así compartirlo? Pues eso.
Ángel Salada
Director
