La pandemia es "una ocasión única" para reforzar y revitalizar la industria

La Asociación de las Empresas Industriales Internacionalizadas (Amec) se ha dirigido este lunes a todas aquellas empresas interesada en impulsar la industria a la sesión online Industria , Last Call. Desde la propia sede de Amec en Barcelona, la actividad ha puesto de manifiesto cómo la industria es la clave de la recuperación y el progreso.

Joan Tristany , director general de Amec , con una presentación titulada Un relato positivo de la industria, ha expuesto la relevancia de esta actividad económica que "tiene como propósito transformar materias primas en productos elaborados, utilizando fuentes de energía".

En su opinión, lo primordial para saber dónde estamos es analizar de dónde venimos. Cita al economista Juan Tugores, indicando "que tendemos a dedicar muchísimos esfuerzos a analizar las causas que nos llevan a las crisis, pero dedicamos mucho menos tiempo a analizar cómo hemos salido de las mismas, obteniendo aprendizajes e implantando cambios para generar mayor resiliencia, mayor adaptación y menores desigualdades en las crisis que seguramente tendremos en el futuro" .

Así sucedió en la crisis de la primera década de este siglo. Ya en la recta final de la misma hubo un gran consenso público en el que se decía que teníamos mucho que cambiar en el proceso productivo, recuerda, Tristany, lamentando que, como país, "no hemos hecho los deberes, o no de forma suficientemente eficiente".

La excepción, bajo su punto de vista, es el sector exterior, que sí ha experimentado un cambio estructural, "consolidando un modelo que no se ha tambaleado desde entonces y ha contribuido constantemente al crecimiento de nuestro PIB". Muestra de ello, argumenta, es la "solidez" de la internacionalización de nuestra economía, que ha aumentado un 10% aproximadamente en la última década.

En el otro extremo, considera que el resto de resultados son conocidos. "El peso de la industria en nuestro PIB se aleja objetivo fijado por la UE, de la media europea. Pero lo más preocupante es que se aleja del de nuestros principales competidores".

En este sentido, apunta el experto, "la brecha en la intensidad innovadora respecto a nuestros competidores se agranda a marchas forzadas". Aún haciéndolo bien, cree que "tardaríamos décadas en alcanzar a los líderes en innovación". No obstante, "hoy tenemos una situación que podemos plantear, como una repesca, una reválida o una recuperación, además con la posibilidad de subir nota y salir reforzados".

Eso sí, alerta de que es la última oportunidad, y aboga por "un cambio de modelo en el que la industria vuelva a estar en el centro". Para ello será "imprescindible" que afronte una gran transformación. "Estamos ante un gran riesgo, pero tenemos una gran oportunidad. El reto está servido".

¿Por qué apostar por la industria?

Ahora bien, Tristany admite que ´hacer industria´ no es fácil. "Las barreras de entrada son altas: financieras, tecnológicas y de conocimiento. Crear una empresa industrial cuesta muchísimo, en cambio, cerrarla, puede puede ser cuestión de muy poco tiempo".

Afrontar estos retos, explica, es necesario, pues "la industria genera progreso, un progreso que hemos ido perdiendo de forma paralela a la pérdida de peso de la industria en nuestra economía" . La industria "genera un empleo de mejor calidad, es más estable, mejor retribuido y con una mayor formación continua". Algunos datos ilustrativos que sostienen su afirmación es que los salarios en la industria son casi un 20% superiores a la media de la economía y un 95% de las personas que trabajan en ella. son asalariados.

La industria, además, "es mas resiliente en momentos de crisis", según el director general de Amec. "Demanda y atrae talento e impulsa las infraestructura, y tiene una característica muy especial, que genera un impacto inducido en otros sectores" . Así, por cada euro de PIB que genera la industria, se producen 1,6 en el resto de sectores; por cada empleo nuevo, se generan 1,5 en el resto de sectores; y por cada euro invertido, 4 en el resto de sectores. Asimismo, añade, "moviliza a su alrededor más recursos, más empleos, y más inversión en I+D que cualquier otro sector".

¿Dónde nos encontramos?

Por su parte, Raül Blanco Díaz , Secretario General de Industria , con la ponencia La industria como motor de recuperación, ha explicado en el momento de transformación en el que se encuentra esta actividad en España. Aunque suene a tópico, subraya, "por primera vez estamos viendo cambios que se están acelerando. La industria, durante todos estos meses anteriores, ha tenido un papel muy relevante, hemos visto la importancia de esa soberanía industrial y de contar con activos en cada uno de los países europeos para abastecernos, cuando no hemos tenido disponibilidad, de los productos necesarios para luchar contra esta pandemia".

El experto opina que durante muchos años hemos estado muy lejos de la política industrial, pero ahora tenemos por primera vez una conjunción favorable gracias a "lo que hemos vivido en la pandemia, a la aceleración de las tendencias a nivel de transición ecológica, a la digitalización, y a la necesidad de contar con una soberanía industrial sin renunciar al mercado interior".

Por tanto, afirma, combinar esas facetas es esencial para tener una industria fuerte, para hacer músculo interiormente ante cualquier amenaza que podamos sufrir. "Lo único que sabemos, sea la amenaza que sea la que nos venga, es que la industria es lo único que nos va a permitir responder a ella. Si no tenemos industria, vemos que estamos completamente cojos. Ante ese entorno la mejor garantía es fortalecer la industria".

Todo ello remarcando la ocasión única que tenemos por delante. El momento es ahora. "¿Por qué? La severa situación económica y sanitaria que llevamos viviendo hace más de un año, ha llevado a acuerdos históricos a nivel europeo. Es decir, la salida a la actual crisis es muy distinta a la anterior" . En 2008 "nos encontramos con la austeridad como respuesta y con una situación empresarial tremendamente difícil. Desde aquella crisis ha habido una transformación estructural innegable en España, la balanza por cuenta corriente".

Por primera vez, apunta, "estamos en una situación de crisis económica con superávit, esto no no ha sucedido nunca en la Historia. Y además llevamos casi 10 años de superávit de equilibrio exterior". La variable ha sido la competitividad de la industria que hemos ganado. " No podemos dejarla perder, al contrario, tenemos que fortalecerla", subraya Blanco.

Por tanto, para la salir de la crisis actual, " tenemos un sector industrial más competitivo. Asimismo, la respuesta de la UE ha sido completaste diferente. El marco presupuestario de los Fondos Next Generation EU permiten una salida absolutamente distinta".

En tercer lugar, hay liquidez en el mercado, el sistema financiero está saneado y funcionando. Así pues, "no hay problemas de solvencia para las empresas, y si los hay, existen instrumentos para luchar contra ellos".

En suma, el entorno de salida de la pandemia es completamente diferente.

Sobre todo porque de los 750.000 millones de fondos de la UE, España va a recibir 140.000 millones (la mitad como transferencias directas en los primeros tres años y el resto, mediante préstamos que podrá solicitar a partir de 2024). "Esta cantidad es una oportunidad única", aclara.

De 1985 a 2010, España recibió 80.000 millones de transferencias netas desde la UE. Ahora vamos a recibir 70.000 euros de transferencias en tres años, "esto es excepcional, un hito histórico".

De modo que "no podemos fallar, lo tenemos que hacer bien si o sí, porque no va a haber otra oportunidad como esta".

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